viernes, 25 de enero de 2008

Casi Búcaro

Eritrina tomada en Floridablanca, área metropolitana de Bucaramanga

Eritrina, Mulungo o Brasileiriño, nombres brasileros, es un árbol pariente del Búcaro de Bucaramanga y Santander, en Colombia. Precisamente en cercanías de esta ciudad encontramos esta eritrina verde-amarilla en floración.

En el sitio Árboles del Brasil o encontramos la siguiente definición

Eritrina, Brasileirinho (Erythrina indica picta)

Árbol de porte medio, es una especie de origen australiano bien difundido en el paisajismo brasilero. La característica principal son las hojas verde-amarillas. Su floración rojo es discreta y se da en medio de las hojas.

Eritrina o Mulungu

Otros aspecto de la misma eritrina de Floridablanca



martes, 22 de enero de 2008

El mundo al revés - Locutores de radio en televisión




Foto EFE - www.publico.es/resources/archivos/2007/9/27/1...


Análisis

En un país que tiene un canal llamado ‘del Dique’ y donde los vehículos tienen prelación sobre los personas, es un país que hace las cosas al revés. Como llevarse los locutores del medio radio para la TV, con el argumento tropical de que aquellos le ponen más emoción a la narración.

El revés
Es costumbre colombiana ver los partidos de fútbol con el audio de los narradores radiales. Generalmente los más fanáticos le bajan el sonido a la televisión y ponen el radio a todo volumen. Así, se mezcla la imagen de un medio frío con el sonido de un medio caliente; la primera con exceso de elementos que literalmente muestran lo que sucede en la cancha, el segundo, con la versión hablada de lo que supuestamente está pasando allí. Olvidan que la TV es un medio completo, un medio audiovisual.

Alertados por semejante competencia y para no perder la preferencia del audio con las emisoras de radio, los productores de TV deciden llamar a estos locutores y los dejan en la plantilla como lo más preciado de sus transmisiones. Generalmente el ídolo es uno de los narradores favoritos que han llegado a la cúspide de alguna de las cadenas nacionales. Generalmente es gritón y tiene un reconocido estilo, por lo cual los oyentes sienten por él una inocultable simpatía: “el mundialista”, “el campeón” y otros epítetos creados por la publicidad. Olvidan ellos que la imagen está mostrando las acciones y que el locutor generalmente es impreciso, va atrasado, recorta algunas incidencias y reitera o engalana las acciones que el espectador está contemplando.

La emoción
Así cree la gente (no creo que los productores) que la emoción del partido está en el locutor. ¡Claro! Con la emisora a todo volumen y el tono alto típico de la locución deportiva, la gente se siente retribuida en el inconsciente, quizás rememorando las épocas cuando los partidos de fútbol no se transmitían por TV y el aficionado se “pateaba” el partido en su transistor.

De esta forma el canal de audio es copado casi totalmente por unos señores encerrados en una cabina, aislados del campo de juego, generalmente mirando un monitor, en donde sólo se escucha la voz del narrador… y un rosario de mensajes comerciales que, al estar en el mismo tono del narrador, hacen creer al fanático que todo es parte de la misma narración; por lo tanto parece no haber interrupciones. Y esto les hace parecer diferente del corte que se produce cuando el fenómeno pasa en la TV.

El derecho
El lenguaje audiovisual de la televisión es muy diferente. En los países que saben manejar este medio, los narradores no le meten el dedo en la boca al televidente. Ni lo irrespetan. El tono del narrador es más pausado porque la imagen habla, está en primer plano. La función del narrador es un complemento, que señala al espectador los nombres de algunos jugadores o comenta la incidencia de las principales acciones, no una reiteración amañada e imprecisa de la imagen. Es una secuencia que se articula con el comentario.

La función del audio en la TV es muy diferente, pues la verdadera emoción no la da el tono del locutor, sino los jugadores con sus acciones, con sus voces, con su jadeo, con el balonazo; la dan los sonidos de la tribuna, los cantos de las barras, las imprecaciones de los fanáticos, las indicaciones de los técnicos y hasta el ruido de objetos que arrojan. Todo eso es lo que le da la verdadera emoción a un partido de fútbol.

Aquí, los genios cierran o aislan el canal de audio del estadio, que queda como en un séptimo plano y dejan como estrella invitada al locutor de marras.



Recuerdo las épocas de narrador de Gabriel Muñoz López, así como las de Andrés Salcedo (foto) en la Voz de Alemania, con sus partidos de la Bundesliga. Era cosa de maestros. Ello confirma que el tiempo pasado fue mejor en producción de televisión en Colombia, por lo menos en el audio.



Los comerciales, una sarta de abusos
Hay quienes dicen que la televisión la pagan los patrocinadores. Y tienen razón. Pero de ahí a que al televidente lo llenen con cientos de mensajes comerciales hay un gran abismo. Y un gran abuso.

La sarta de comerciales parece que fuera un mal necesario que tuviéramos que aguantarnos los colombianos. ¡No! Esto no tiene por qué ser así. Da gusto ver partidos en los que juega la selección nacional en canales como ESPN, donde puede uno ver 90 minutos sin interrupciones odiosas y abusivas. Lo que quieren los canales es multiplicar las utilidades a costa del respeto al televidente, especialmente al televidente cautivo, aquel que no tiene la opción de cambiar de canal. Y también de la degradación del espectáculo, convirtiéndolo en una plaza de vendedores que invaden el espacio público y hasta el privado de las salas y habitaciones de las casas, a donde llega la televisión. Esto sí es un gol al buen gusto y a la paciencia.


Una muestra
La Copa América de Fútbol 2001 se inició el 11 de julio en Barranquilla, con el partido ante Ecuador, que la selección colombiana ganó 1-0. Unos 40 mil fanáticos hacían barra en el Metropolitano y cerca de 20 millones en todo el país estaban pegados al televisor.

Ese día nos dimos a la tarea, a manera de ejercicio, de cuantificar los comerciales durante la transmisión de TV. Se contabilizaron aproximadamente 150 comerciales.

Los formatos en ese momento fueron: proyección del spot en recuadro, franja horizontal animada o estática con audio, aparición de logo con o sin audio y mención del mensaje sólo audio, sin imagen. La duración de los comerciales osciló entre 10 y 30 segundos.
De los 90 minutos de juego, 40 minutos estuvieron dedicados a comerciales y 50 minutos a narración y comentarios, sin contar los 15 minutos de descanso, otro rosario de comerciales, comentarios y repetición de las jugadas.

Como se ve, las cifras son abrumadoras. Y los telespectadores pasan el partido como si nada. Con unas cuantas cervezas o el aguardientico, nadie parece prestarle atención a los mensajes, a los formatos, a la estructura de la información y el partido es la barraquera. Las utilidades son maravillosas y el público queda listo para una próxima oportunidad.

Veremos si en los siguientes partidos, en junio de 2008, las cosas cambian. Por lo pronto, los formatos de comercialización se mantienen y la televisión colombiana sigue cosechando utilidades.

De remate
Ese invento colombiano es tan pintoresco como escuchar una partida de ajedrez narrada por la 'Nena' Jiménez, con comentarios de Martín de Francisco.



miércoles, 16 de enero de 2008

La torta publicitaria de la televisión: el plato más apetecido de Colombia




“La televisión continúa como el medio de mayor audiencia. En el segundo semestre de 2007 la audiencia llegó a 94%. El siguiente medio con mayor audiencia es la radio (68,9%), la cual tuvo un descenso de 2,6 puntos porcentuales”. Así se lee en el documento Módulo de Televisión Estudio General de Medios EGM Segunda Ola 2007, de la Comisión Nacional de Televisión - CNTV.

De igual manera, el comisionado Fernando Álvarez, en el Memorando para la Junta Directiva de la CNTV sobre el Cuarto Canal para la operación de televisión abierta privada, presentado por el pasado 19 de noviembre, señala que “a pesar de diversas opiniones que afirman que la pauta no ha crecido en los últimos años, encontramos que firmas como LAMAC (Latin American Multichannel Advertising Council) afirma que la inversión publicitaria ha crecido año por año en Colombia; en Televisión Abierta viene creciendo a una tasa cercana al 15%, mientras que la inflación anual no supera el 6% en esos mismos periodos”

Álvarez también cita cifras de la Asociación Nacional de Anunciantes – ANDA, donde se señala que la inversión neta para el año 2006 alcanzó aproximadamente $1.5 billones, con un crecimiento del 14.2%, en el que hay que resaltar que la TV abierta se lleva más del 50.3% de la torta publicitaria.

Pero eso no es ‘nada’. Tomando los datos de Ibope, a diciembre de 2007, la inversión publicitaria en la televisión nacional acumulada durante el año ascendió a 2,9 billones de pesos, con una participación de 42%.
Por su parte, la TV regional sumó $470,4 mil millones (7%) y la TV internacional $257,1 mil millones (4%).

En total, la inversión en medios publicitarios en Colombia llegó a $6.973.713.241.000, es decir, ¡casi 7 billones de pesos!

Como se ve es una torta nada despreciable que los canales privados RCN y Caracol, con audiencias que bordean el 90%, no quieren compartir.

Por eso tiene razón el comisionado Fernando Álvarez, cuando dice que “el negocio de la televisión crece a pasos agigantados, poniendo en los ojos de los inversionistas extranjeros una opción de mercado que nosotros al interior de esta junta no podemos desconocer”.

Hoy los televidentes exigen mejor calidad, más variedad en los contenidos y mayor oferta. ¿Podrá el país ganarle el pulso a los monopolios?






La ‘torta’ alcanza para todos


El mercado de la publicidad para la televisión nacional espera la llegada de nuevos actores. Los televidentes también.



La televisión colombiana parece que no sólo tendrá un tercer canal de televisión nacional privada, sino que posiblemente habrá cupo para un cuarto en el tinglado de los ratings.


Así lo indicó la Comisión Nacional de Televisión CNTV como una posibilidad, ya que cinco empresas extranjeras han confirmado y una más ha manifestado su intención de participar en la torta publicitaria más apetecida del país.


Aunque falta conocer nuevos estudios de mercado que confirmen la viabilidad financiera de estos nuevos canales, varios críticos y empresarios de la televisión han expresado su interés en esta oportunidad. Sin embargo, los actuales operadores, RCN y Caracol, están renuentes a aceptar este panorama y han reiterado que el negocio no es viable, que ‘no hay cama p’a tanta gente’.


Sin embargo, el director de la CNTV, Ricardo Galán, confirmó que el grupo de banca de inversión Equity Investment encontró un mercado que permitiría hasta cinco canales privados.


El funcionario resaltó las oportunidades que representa para el país la inversión extranjera en generación de empleo y de divisas, además de transferencia de tecnología.


Según Equity, la licencia del tercer canal tiene un costo aproximado de US$32 millones, bastante menos que los US$95 millones que en su momento pagó cada uno de los canales privados.


Por su parte, los representantes de RCN y Caracol piden que, de hacerse la adjudicación, los nuevos operadores deben acogerse a las mismas condiciones que ellos debieron cumplir hace nueve años:


“Noventa y cinco millones de dólares del valor de concesión, el montaje de una red de transmisión, el pago del 1.5 por ciento de la facturación bruta anual, o sea, lo mínimo que pedimos es que… las condiciones para ese nuevo canal sean iguales a las que nos exigieron a RCN y a Caracol”, dijo en su momento el presidente de RCN Televisión, Gabriel Reyes, ante la Comisión Sexta de la Cámara.


Por su parte, el secretario general de Caracol, Jorge Martínez, expresó su temor de que la TV extranjera “se coma la telenovela nacional”.


El tercer canal (y quizás también el cuarto) será adjudicado por licitación pública a comienzos de 2008 y sus operaciones iniciarán en 2009.


La discusión sobre este tema se realizará posiblemente en marzo de 2008, cuando se haya tomado la decisión sobre el sistema de televisión digital que se adopte en el país, en reemplazo del sistema análogo actual.


Los directivos de los canales argumentan que existe pluralidad informativa, representada en la suficiente oferta de la televisión colombiana.

Pues bien, éste es un tema con tela de donde cortar que dejamos para otra ocasión.

lunes, 14 de enero de 2008

Búcaro


Búcaro o Bucare-Ceibo

“Este árbol, del género de las eritrinas y de magnífica floración, poblaba la meseta de Bucaramanga cuando llegaron las primeras huestes conquistadoras al mando del alemán Ambrosio Alfinger. De ahí coligen algunos historiadores que proviene el nombre de la ciudad de los búcaros”, se leía en la publicación: XII Exposición Nacional de Flores de 1969, del Club de Jardinería de Bucaramanga, presentando la foto de la portada.


En la presentación de la ciudad para ese mismo certamen, el periodista, historiador y hombre de fino humor, Luis Enrique Figueroa (el 'Tuerto' Figueroa) decía: “Se le dio un nombre que puede tener enraizadas semejanzas botánicas, por tratarse de una manga o terreno cultivado de búcaros. O como evocación de algunos condimentos alimenticios preparados con barro que se llamaron búcaros”.


Incluso, en Ocaña, en el vecino departamento de Norte de Santander, se prepara una receta con flores de búcaro.

Por eso, aunque pudo ser 'guayacán', 'caracolí' o 'guayabo', se prefirió para este blog el nombre de "Ciudad de los Búcaros" (ciudaddelosbúcaros), como también se la llama a Bucaramanga.

En el diccionario de la Academia Española de la Lengua aparece el nombre bucare o búcare, definido como “árbol americano de la familia de las Papilonáceas, de unos diez metros de altura, con espesa copa, hojas compuestas de hojuelas puntiagudas y truncadas en la base, y flores blancas”.

Un árbol muy parecido, por no decir el mismo, lo encontramos en la página Árboles del Brasil, de donde procede esta foto. Allí se presentan varias especies de eritrinas, entre ellas el mulungu, que a la distancia se ve más parecido al búcaro santandereano.

En esa página se lee en portugués:

"Mulungu (Erythrina verna) Árbol nativo muy bonito, con florecimiento rojo vivo. Existen varias especies de Mulungu o Eritrinas. Entre ellas, ésta (la de la foto) es la más llamativa, de gran porte, común entre los árboles de esta región (en el Este de Minas Gerais), y que presenta floración con ausencia total de hojas. La época del florecimiento varía entre agosto y septiembre, pero el árbol no mantiene sus flores más de una o dos semanas".


domingo, 13 de enero de 2008

Por qué Ciudad de los Búcaros

Un búcaro. Foto publicada en ciudaddepensamientoplano.blogspot.com
Como dice allí, no se trata de un fanático del equipo de fútbol de la ciudad, sino del árbol que, según se dice, dio el nombre a la ciudad.

Según la versión más extendida, Bucaramanga significa: lugar de residencia del 'Señor' o Cacique y parece ser de origen chitarero, etnia indígena que habitaba en una extensa región montañosa al oriente de esta ciudad.

Y "como ningún fraile doctrinero escribió un vocabulario de la lengua chitarera, es imposible conocer la etimología original de la palabra Bucaramanga", se lee en Wikipedia, versión que parece la más probable.

Al occidente de los búcaros










Al oeste de Bucaramanga, sobre la montaña que da a Zapatoca y atrás a la Serranía de los Cobardes, se ven las luces del amanecer.


Comentario a la foto de abajo:
La mujer de rojo empujó y empujó a las señoras Rojas y de Rojas, relegándolas a un segundo plano, para quedar en primera fila y al lado del Comandante. Éste alza al nieto de la señora de Perdomo y ella al nieto del presidente. Mejor composición no la podría cuadrar ni Oliver Stone.

jueves, 10 de enero de 2008

Nace con la libertad

En este 10 de enero de 2008, día en que liberaron a Clara Rojas y Consuelo González de la cruel tortura del secuestro y que marca el comienzo de una nueva etapa para cientos de familias que aún siguen esperando ver libres a sus seres queridos, nace este blog.

No hay mejor símbolo para este espacio en su propósito de contribuir a liberarnos de tantas circunstancias que padecemos, como la injusticia, la negligencia, la corrupción, la ignorancia, la desidia, la indolencia, la envidia y el egoísmo y tantas otras enfermedades que no dejan vivir plenamente a nuestro conglomerado social.

Contribuir a derrotar a esos males es el propósito de este espacio que desde hoy compartimos con el mundo.

¡Oh, júbilo!

¡Oh, júbilo!
Foto de AP, publicada en la página web del diario argentino La Nación www.lanación.com.ar.